La ira es lo peor que uno puede tener. Bueno, no te digo yo que no. Sin embargo, todos la tenemos presente en mayor o menor medida. No dejamos de ser humanos. Y negar nuestra propia naturaleza también puede ser peligroso. Hay que conocer la ira muy de cerca para saber cómo controlarla. Eso es lo realmente importante. Por cierto, vaya venas, ¿no? ¿Te vas a hacer una analítica de sangre o algo? ¿Te has pegado unas cuantas palmetadas ahí en el antebrazo o qué?

Esas penas eran de ira porque había pasado un problema en el trabajo y yo estaba enojado. Pero sí, yo la ira la tengo desde hace mucho. La he controlado muy bien porque si no hubiera controlado la ira hoy, hubieran pasado un montón de locuras acerca de donde yo vivo. Entonces, todo bien. Muy difícil controlarla, pero hago lo que puedo.