Sí, la verdad que es maravilloso. En este caso, estos gatetes no son de acogida, ya se van a quedar definitivamente en casa, así que va a ser su casita, así que van a ser cuidarlos y verlos crecer mucho, mucho, mucho, mucho hasta el fin de sus días, la verdad. Y nada, ahora lo que le queda es llevarse bien con mi otro gato.