El paradigma del grupo mínimo es una técnica de enseñanza utilizada por Jane Elliot, una educadora y activista estadounidense para enseñar a sus estudiantes sobre la discriminación racial. En este ejercicio los estudiantes son divididos en dos grupos de manera arbitraria, según el color de sus ojos y se les asignan roles. Los estudiantes con ojos de color azul son tratados de manera preferencial mientras que los estudiantes con color de ojos marrón son discriminados y ridiculizados. A través de este ejercicio, Elliot quería enseñar a sus estudiantes cómo se siente ser discriminado y cómo las actitudes discriminatorias pueden afectar a las personas. Después de llevar a cabo este ejercicio con sus estudiantes en 1968, Elliot ha seguido utilizando el paradigma del grupo mínimo en talleres de diversidad y ha sido reconocida como una líder en la lucha contra la discriminación racial en Estados Unidos. Es importante recordar que estos experimentos y conceptos no son solo teóricos, sino que también tienen implicaciones prácticas en nuestras vidas cotidianas. Al entender cómo funcionan estos procesos sociales, podemos ser más conscientes de nuestras propias actitudes y comportamientos y trabajar para crear una sociedad más inclusiva y más justa.