Nuestra alma, ADN y espíritu se nutren y comunican usando vibraciones celestiales y energías espirituales, pero éstas han sido contaminadas por ángeles caídos y pronto pretenderán replicarlas con sonidos eco y energías IA. Por todo ello, el Verbo enviará su código santificador a enseñarnos a producir y recibir vibraciones y energías originales.