Escúchame, comiendo chocolatito que tengo más hambre que el perro un ciego, ¿a ver? Después de hablar dos horas aquí de cosas paranormales. A tope.

Cris, no es por nada, pero que sea la última vez que te veo con esos leds en la habitación. ¿Por qué? Pues porque son míos. Y sé perfectamente que me los has robado. Esos leds son míos. Yo siempre tengo leds blancos. Así que, una de dos. O dejas de lucirlos, o quedamos y me los devuelves. Porque bastante que no he denunciado este acto. Me parece muy mal por tu parte. Encima ahí regodeándote con el chocolate, qué mal, tío, de verdad. Chorizo.