¿Qué tal estamos, Indín? Nada, que te mando un saludo, que espero que hayas tenido buen día. Y sí que era bonito, ¿no? Yo también alguna vez removiendo algún cajón me encontré alguna carta que luego encima las ves y dices, bueno, como no la he afirmado, vete a saber de quién era esa carta, ¿no? Cuando te la enviaron igual hace tantos años. Pero era bonito, ¿no? Cuando te hacían algún dibujo, alguna carta, alguna dedicatoria. Era bonito y bueno, eso ya se ha perdido. Con esto del WhatsApp ya no te lo manda a ti, vamos. Lo manda, lo reenvía y ya sabes. Venga, un besazo, buen día.