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En cualquier momento de la vida, puedes sentir tensión entre la reflexión y la acción, la planificación y la espontaneidad, las expectativas y la realidad. Cuando las cosas van más despacio de lo que esperas, puede que anheles impulso o nuevas estrategias. Cuando las cosas van demasiado deprisa, puede que deses equilibrio o simplicidad. ¿Pero y si tuviera bien no tenerlo todo resuelto a la vez? ¿Y si no tuvieras que tenerlo todo resuelto para vivir una vida intencional aquí y ahora? La tensión de las cosas puede resultar abrumadora, por lo que es importante ser intencional acerca de la forma en que te mueves a través de cualquier situación como puedas, siendo gentil contigo e identificando lo que funciona mejor y lo que no, tomando la oportunidad para crear tu ritmo, reducir la velocidad y considerar cómo se ve el crecimiento gradual desde donde estás. Incluso permitirte ser más agradecida por ser consciente es una forma hermosa e intencional de vivir. A veces, podemos encontrarnos rodeados de otras personas que viajan a un ritmo diferente al nuestro. En otras ocasiones, nos encontramos viajando a un ritmo diferente del que habíamos previsto para nosotros mismos. Así que en todos estos espacios, que sepas que eres libre de sentir lo que necesitas sentir y practicar en nombrar tus necesidades aquí y ahora. Eres libre de hacer lo que puedas con tu ahora, siendo amable contigo mismo mientras continuamos el camino de vivir.